A lo largo de nuestra
vida nos aferramos a cosas banales, a personas que en un principio nos daba
seguridad pero con el paso del tiempo aprendemos que esa seguridad esta con
muchas brechas, intento imaginar una persona que se sienta igual a mí y sé que
existe porque no estoy solo como tú no estás solo/a.
LETRAS DE MI INTERIOR
Para ganar hay que
aprender a perder, porque esa es nuestra lección, ya se me cada patrón del frio
suelo de las veces que he caído y he contemplado innumerables estrellas, he
sentido la soledad arropándome y siendo mi compañera…
Intente ayudar a los
demás dejando de lado lo que sentía o de lo que debía hacer, para que luego me
sonrieran y yo contestándole con una sonrisa para darme cuenta que esa sonrisa
era más dolorosa que mil puñaladas…
Hago lo que debo hacer de
la mejor forma que se y lo más importante que aprendí es disfrutar ese ligero
momento que me hace sentir bien con una sonrisa…
El invierno, dolor,
soledad es lo que disfruto mejor y eso me sabe muy bien, así que solo me resta
decir que cuando caiga nuevamente solo me iré ya que mi esperanza es solo la
ilusión de la terquedad, aun siento su olor cuando duermo y no quiero
despertar…
Aun no pierdo la ilusión,
pero sé que todos al mi alrededor le ponen nombres a sus lágrimas yo no
necesito nombrarlas solo secarme porque ya no volverán y levanto lo que he
dicho con una sonrisa…
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