martes, 16 de mayo de 2017

MAMA! HAY UN MONSTRUO BAJO DE MI CAMA, CAPITULO III - ANDRES RIVER

Continuación de la III parte de este cuento de terror.

andres river, laergastuladelpensador, mama, cuento de terror


----------------------------------------------------------------------------------------

CAPITULO III
-Sólo dános una buena razón para no hacerlo-Musitó Hortensse intentando calmarlo.   -Bueno, está bien-Contestó Isaac en tono seco-Hortensse, cálmate. Quizás sólo fué un sueño que tuvo el pequeño. Nada más. Mira, te diré algo, hijo; yo nunca me mudaría a una casa encantada. Te lo juro. Y si hubiese visto que esta lo estaba pues no me hubiera atrevido a venir aquí con vosotros. ¿Vale hijo?  
-Sí-Contestó Peter.            
Esa tarde no pareció normal. Una demoníaca  y pesada niebla se extendió por todo aquel lugar...Hortensse e Isaac estaban discutiendo. Se insultaban y muy a menudo Isaac pegaba a su mujer.  
El pequeño niño de apenas 7 años presenciaba esta escena desde el balcón de la escalera de caracol que daba al salón. 
-¡Cómo quieres que no me enfade, Hortensse!, si ya te he pillado de lleno...-Gritó Isaac furioso frente a su mujer. 
-Isaac...Yo no he hecho nada, te lo juro...-Se lamentaba la mujer entre sollozos.          
-¡Cómo te atreves a...!, ¡qué cara tienes, Hortensse!-Siguió el padre.                              
-Te juro que yo no tengo nada que ver con esas cartas, cariño.                                 Isaac soltó una bofetada de lleno en toda la cara de su mujer.                                   Hortensse cayó al suelo dolorida y el hombre sacó de su bolsillo un sobre escrito.     -Aquí pone:                                                                            
   ~William, siempre te llevaré en mi corazón. Gracias por esa noche tan fantástica   
                                                               Tú enamorada...  
-Juro por mi vida que esa carta no tiene nada que ver conmigo, Isaac.  
-¿Y cómo demonios explicas que estaba en tu mesa de noche?-Aportó Isaac esperando la confesión.     
-No lo sé...Pero...Te juro que eso no es mío.   
Peter no aguantaba más...Indignado por la incredulidad de su padre y la infidelidad de su madre, se fué a pasear un rato en el bosque.      
Un anciano viejo y pálido yacía sentado en un banco, contemplando fijamente la casa. Como si la conociese de toda la vida.    
Peter se le acercó y se sentó a su lado. 
-¿Qué te pasa, pequeño?, no te veo muy buena cara-Murmuró aquel desconocido personaje. 
-Nada, sólo que mis padres están discutiendo. Desde que nos mudamos aquí están discutiendo. No sé por qué es-Explicó.                                                                            
-¿Vives aquí...?-Dijo en un tono chocante.                                                                   -A sí es.                                                                      
-¿Es que no sabes lo que pasó allí?-Atacó mientras abría los ojos como platos.  
-¿¡Qué pasó!?-Gritó de repente.                                                                                  
-Ocurrió hace años-Comenzó-Una mujer se vino a vivir con su amante a esta casa.   Ésta, descendiente de una familia muy rica, dejó a su marido y una fría noche partió mientras él dormía.      



0 comentarios:

Publicar un comentario

Cualquier comentario Agresivo/Spam sera borrado.